La compañía Remolcadores Ibaizabal y Astilleros de Murueta han ultimado las pruebas del nuevo remolcador propulsado a Gas (LNG) y Gasoil (Dual), que entrará en servicio en el Puerto de Bilbao próximamente, dentro de la flota del servicio portuario de remolque.
En este proyecto participa, además del armador y el astillero, el Gobierno Vasco, a través del Ente Vasco de la Energía. Asimismo, está incluido en el proyecto CORE LNGas hive de la Unión Europea, en el que participan la Autoridad Portuaria de Bilbao, Enagas, Puertos del Estado, Ibaizabal, Murueta y el Ente Vasco de la Energía.
El remolcador llevará el nombre de Ibaizabal quince y tiene 28 metros de eslora,12 metros de manga, un registro bruto de 397 GT, una capacidad de tiro de 55 toneladas y alcanza una velocidad de 12 nudos.
Pioneros en la gestión medioambiental
El Puerto de Bilbao es pionero en la gestión medioambiental y promueve diferentes iniciativas que encajan en los ejes seleccionados por el sistema portuario para contribuir a la Agenda 2030. Uno de ellos es potenciar el suministro de GNL a buques. Además de la entrada en servicio de este nuevo remolcador, Repsol ha anunciado recientemente que quiere construir, en el Puerto de Bilbao, su primera gasinera. Fruto del acuerdo con Brittany Ferries, estará aneja a la terminal donde atracan sus ferries, y abastecerá a los barcos propulsados por GNL que esta naviera está construyendo, y a otros buques cuando no esté ocupado el atraque.
Esta iniciativa se suma a otras llevadas a cabo con anterioridad como el primer bunkering “truck to ship” (de camión a barco) realizado en 2017, o la primera prueba piloto de carga de GNL de un barco a otro de todo el Arco Atlántico y del Mediterráneo realizada en febrero de 2018.
Asimismo, Bilbao fue, hace un año, el primer puerto del mundo que obtuvo Declaración Ambiental de Producto (DAP) o en inglés Environmental Product Declaration (EPD), basado en el Análisis de Ciclo de Vida de los servicios portuarios. Otra iniciativa medioambiental ha sido la sustituido el alumbrado exterior del Puerto por tecnología LED. Este proyecto ha permitido que en 2019 el consumo eléctrico se redujera en un 14% respecto a 2018. La inversión ascendió a 1,6 millones y contó con una financiación del 50% de la CE dentro del Fondo de desarrollo regional, Feder.
Otros consumos, además del eléctrico, han experimentado un importante descenso el año pasado gracias a las iniciativas puestas en marcha en este sentido y, así, se ha reducido un 7% el consumo de combustibles de automoción, un 5% el consumo de agua, un 37% las emisiones totales de Gas de Efecto Invernadero (GEI) a la atmósfera, o un 24% el consumo de papel. En estos momentos se trabaja en la puesta en marcha de un Plan estratégico energético para el Puerto de Bilbao.