- La construcción de la planta y la instalación de maquinaria específica requerirán una inversión global de 55 millones de euros.
- Su actividad generará entre 250 y 300 nuevos empleos directos, y entrará en funcionamiento en el primer trimestre de 2018.
- Tendrá una capacidad de fabricación de 180 torres/año, compuesta cada una de ellas por tres tramos, y por sus dimensiones se requiere que su fabricación se lleve a cabo junto a los muelles portuarios.
- Con este proyecto estratégico se avanza en la creación de una industria eólica vasca pujante y en expansión, y el Puerto de Bilbao afianza su posición como puerto especializado en proyectos.
Los trabajos de construcción de la planta de fabricación de torres eólicas para instalaciones “offshore” que Haizea Wind pondrá en marcha en el Puerto de Bilbao se han iniciado este mes de julio. La inversión total a realizar, entre la construcción de la nave y su equipamiento y puesta en marcha, ronda los 55 millones de euros.
La Autoridad Portuaria de Bilbao ha adjudicado en concurso público, por 17,6 millones de euros, la construcción de la nave a la UTE formada por las empresas Construcciones Intxausti, Byco (Inbisa Construcción) y Gaimaz Infraestructuras y Servicios. El plazo de ejecución de siete meses y medio.
El complejo edificatorio tendrá 48.800 metros cuadrados y estará ubicado en una parcela de cerca de 77.000 metros cuadrados en el muelle AZ-2 de la Ampliación del Puerto de Bilbao, en Zierbena. Estará compuesto por una gran nave principal, a la que se anexionarán un edificio de servicios y un edificio administrativo. La altura de las naves será de 20 metros.
Esta construcción y su uso se enmarcan dentro del plan de inversiones de la Autoridad Portuaria para activar la puesta en marcha de proyectos logístico-industriales, como el eólico, que aporten tráficos y generen empleos, recursos y riqueza para el territorio. En este sentido, Bilbao es un puerto especializado tanto en grandes piezas, conocidas como proyectos o transportes especiales, como en un sector emergente como es el energético. Por sus instalaciones salen la mayor parte de las piezas eólicas que se construyen en Euskadi e, incluso, algunas de estas empresas se encuentran ubicadas a pie de muelle.
A las empresas del sector eólico ya instaladas, se unió Haizea Wind en febrero de 2017, fecha en la que el Consejo de administración le otorgó en concesión la superficie en la que ahora se está levantando la nave, y que también será otorgada en concesión una vez finalizada.
Entre 250 y 300 empleos
Haizea Wind invertirá, por su parte, 37,4 millones en equipamiento industrial y puesta en marcha de la planta de fabricación y exportación de torres eólicas marinas y otros componentes, que permitirá crear entre 250 y 300 puestos de trabajo directos en momentos de máxima actividad. Se espera que la actividad comience en el primer trimestre de 2018.
La planta tendrá una capacidad de fabricación de 180 torres offshore/año. Una torre offshore estándar está compuesta por tres tramos. La producción se mide en tramos de torre y, por lo tanto, la capacidad de fabricación será de 540 tramos/año. Ello aportará un tráfico portuario de cerca de 107.000 toneladas/año.
Estas torres eólicas constituyen uno de los elementos principales de un aerogenerador, que está compuesto de tres palas, una nacelle y una torre. Además, la planta podrá realizar otras piezas de gran tamaño usadas en los parques eólicos marinos como monopiles y piezas de transición. Como materia prima se parte, por un lado, de chapa de acero al carbono entregada directamente desde las acerías cercanas, las bridas, también de acero, y elementos internos eléctricos y mecánicos.
Se espera que la planta utilice, entre otras materias primas, 65.000 toneladas de chapa gruesa y 7.500 toneladas de bridas.
Las torres eólicas “offshore” tienen un diámetro de hasta 8,5 metros, un peso/tramo de unas 400 toneladas, y una longitud/tramo de 50 metros. Se pueden unir hasta tres tramos de diferentes longitudes, lo que puede llegar a sumar la pieza más de 90 metros una vez acabadas de montar a bordo de los barcos. Todo ello hace que su fabricación tenga un requerimiento intrínseco de realizarse a pie de muelle.
Este es, precisamente, uno de los motivos por lo que la firma ha optado por llevar a cabo esta inversión en el Puerto de Bilbao, ya que elimina el principal reto de esta industria: la imposibilidad de transportar este tipo de producto por cualquier modo terrestre debido a sus dimensiones. Asimismo, su ubicación les permite, en caso de que el mercado lo demande, ser también muy competitivos en la fabricación de torres eólicas terrestres, ya que la planta estará preparada para poder tener la polivalencia de fabricar estos dos tipos de productos, lo cual ofrecerá mucha flexibilidad para adaptarse a las diferentes situaciones de demanda.
Industria eólica vasca pujante
En 2016 se embarcaron en el Puerto de Bilbao 4.480 piezas catalogadas como transportes especiales. Esta cifra supone un 12% más que en 2015.
En los últimos años, el atractivo del Puerto de Bilbao, por sus grandes calados, la disponibilidad de superficie y el el gran número de servicios marítimos con puertos de todo el mundo, ha facilitado la implantación de importantes industrias productoras de “heavy cargo” que requieren tener instalaciones con una ubicación estratégica y con un punto de carga que vaya directamente a barco. Estas empresas se han unido a otras asentadas desde hace tiempo en sus muelles y, así, firmas como Gamesa Eólica, Lointek y ahora Haizea Wind, se han sumado a otras veteranas como Navacel o Vicinay Cadenas.
De este modo, se avanza en la creación de una industria eólica vasca pujante y en expansión, y el Puerto de Bilbao afianza su posición como puerto especializado en proyectos.